lunes, 19 de febrero de 2018

TALES - FANZARA

Una de las acciones para fomentar el turismo de interior en la Mancomunidad Espadán – Mijares ha sido la realización y marcaje del sendero GR-333. Ayer realizamos una pequeña parte entre Tales y Fanzara. Buen marcaje, demasiados tramos de asfalto y escasa información. Suponemos que cuando le llegue la homologación se habrán subsanado estos pequeños inconvenientes. Tales se arremolina a los pies de su derruido castillo a orillas del río Veo y a las puertas de la Serra d’Espadà. El trayecto toma dirección Norte por antiguos caminos entre campos de secano y algunos, los más cercanos a la localidad y con buenas comunicaciones, de regadío. Los cítricos se van apoderando de nuestros montes pese a su aparente abandono en muchos lugares. 

Tenemos que salvar Cantallops para pasar al valle que riega el Mijares. Es quizá la parte más atractiva del recorrido que atraviesa una extensa pinada entre antiguos bancales de pedra en sec. Llegamos al Mas de los Canónigos donde realizamos una corta parada para descansar. Pasamos junto a la fuente y, más tarde, por el Corral de los Casales. Seguimos bajando hasta llegar al Barranco de la Muela que no llevará al río Mijares; el riu Millars. Llega la parte más entretenida de la excursión o, por lo menos, la más fresquita. Hay que descalzarse para cruzar el río algo más crecido que de costumbre. Por un agradable camino llegamos a Fanzara a avituallarnos y disfrutar de su Museo Inacabado de Arte Urbano MIAU.

En esta ocasión Anna se llevó el sorteo de los bastones obsequio de DEPORTES ALVARADO. Creemos que le va a dar mucha caña.


Fotos de Ramón AQUÍ y de Sendeando AQUÍ

miércoles, 7 de febrero de 2018

MONTGÓ

La silueta del Montgó, con sus 753m de altitud, es claramente visible desde muchos puntos de nuestra geografía. Junto a los cabos de Sant Antoni y de la Nao limita por el sur el golfo de Valencia. Fue declarado Parc Natural en 1987 y su privilegiado emplazamiento siempre ha servido de referencia a las poblaciones que se han ido sucediendo. La zona es de una elevada pluviometría y en esta ocasión nos recibió con avisos de lluvia generalizada. Es cierto que durante días la previsión nos daba unas horas de respiro para la mañana del domingo y se cumplió.

El recorrido previsto sigue una línea levante – poniente con inicio en la zona de Les Planes, junto al campo de tiro. La senda está perfectamente trazada y asciende sin pausa por la agreste ladera de levante. Una perfecta sucesión de zigzags nos lleva hasta los seiscientos metros de altitud. Aprovechamos para hacer una parada y recuperar fuerzas para acometer los últimos ciento cincuenta metros hasta la concurrida cima. En un recorrido visual de 360º pasamos de la silueta de las Baleares a las cimas nevada de Aitana, Serrella, Montcabrer,…


Después de un descanso continuamos hacia poniente. La Creu de Dènia queda a nuestra derecha, a nuestra izquierda el Barranc de l’Hedra. Comenzamos el vertiginoso descenso por una preciosa senda, dejamos el desvío a la Cova de l’Aigua y llegamos al Camí de la Colonia. Solo nos queda un tranquilo paseo a nuestro destino final en la Ermita del Pare Pere.

No faltó el sorteo del par de bastones telescópicos obsequio de DEPORTES ALVARADO.

Fotos de Cristina y María AQUÍ y de Sendeando AQUÍ.